VALENCIA
Los vecinos rechazan el jardín que cubrirá el túnel del metro en Benimàmet
El consistorio aprueba el proyecto con una inversión de 4,2 millones de la Generalitat e incluye calles para el tráfico a ambos lados del parque
05.04.14 - 01:02 - La junta de gobierno aprobó ayer el anteproyecto para la urbanización y ajardinamiento del llamado Parque Lineal de Benimàmet, el terreno que quedó libre cuando se soterraron las vías del metro a mediados de 2011. La Generalitat es la que afrontará la inversión de 4,2 millones de euros a través del Plan Confianza, pero el diseño del jardín no ha gustado nada a los representantes vecinales, que ayer criticaron la inclusión de calzadas para vehículos a ambos lados de la gran zona verde.
La urbanización tratará de llenar un vacío de más de un kilómetro de largo, donde ahora sólo se amontona la basura. «Hasta hace poco había hierba y la quitaron, pero los residuos siguen. Casi es mejor lo que había antes», consideró ayer la presidenta de la asociación de vecinos, María José Navarro.
Los residentes mantuvieron hace meses una reunión con el director general de Obras Públicas, Vicente Dómine, y con el concejal de Urbanismo, Alfonso Novo, donde pensaban que podían haber convencido de un cambio en el proyecto, pero no ha sido así.
«Se molestan cuando hablamos de carretera pero es que pensamos que será así. El jardín será un bulevar con un vial entre la estación de Canterería y la de Carolinas, por lo que se desaprovecha la oportunidad de integrarlo con los edificios más próximos», consideró Navarro.
Al estar todavía en fase de anteproyecto, es posible que se alcance algún acuerdo para modificar el diseño del Parque Lineal, aunque esta circunstancia se considera poco probable. El expediente que pasó ayer por la junta detalla entre otras cuestiones el movimiento de tierras y las demoliciones, así como las nuevas calzadas, un aparcamiento y el propio jardín.
La estrecha zona verde discurrirá por la avenida Estación y la calle Miniaturista Messeguer. Supondrá la segunda y última fase de las obras de soterramiento de la línea 1 del metro, que facilitó la eliminación hace tres años de los pasos a nivel en la pedanía de Benimàmet.
Desde entonces, una valla metálica ha rodeado los terrenos para evitar vertidos, aunque algunos tramos han desaparecido. «Al parecer, los han robado», dijo la presidenta vecinal. La flamante estación del metro, acristalada y con una iluminación de distintos colores, se da de bofetadas con los solares cercanos.
«En algunos tramos, el parque queda convertido en un mero seto», insistió la dirigente vecinal. De aquí al final del mandato, la ejecución de este proyecto será la baza principal del gobierno municipal. En la memoria, se insiste en que «la solución consensuada entre las partes interesadas es la convertir un espacio residual de la ciudad en otro con carácter regenerador de relación y comunicación».
El proyecto deja fuera un eucaliptus monumental (el árbol más alto de la ciudad, según los vecinos) al situarse en otro ámbito y «amenazado por las calles previstas». En suma, Navarro consideró que «el trazado es de carretera, calle, o avenida, pero no de un Parque Lineal, al predominar el asfalto y el hormigón, el tráfico y el aparcamiento».
El portavoz municipal de Esquerra Unida, Amadeu Sanchis, se alineó junto a los vecinos en el rechazo al proyecto, al considerar que «no se han tenido en cuenta las reivindicaciones vecinales ni las propuestas de los proyectos de la Escuela de Arquitectura de la Politécnica».
Recordó que se trata de un diseño «antagónico» al que la Conselleria de Infraestructuras presentó en un primer momento, donde «se les prometió que, una vez enterradas las vías, se procedería a construir una gran zona verde que sirviera como elemento integrador de las dos zonas separadas por el tren». A su juicio, la falta de participación pública ha derivado en obras que «no son necesarias y serán una nueva barrera como las vías del tren».
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